√ Los problemas de visión afectan hasta a un 30% de las personas con diabetes, en especial la retinopatía diabética, considerada la primera causa de ceguera en edad laboral
√ Una sencilla prueba de fondo de ojo en un gabinete de óptica puede detectar y prevenir problemas visuales asociados a la diabetes, que pueden agravarse si no se tratan a tiempo
‘Si ahora no, ¿cuándo?’. Con este lema se celebra el próximo domingo, 14 de noviembre, el Día Mundial de la Diabetes, para llamar la atención sobre la necesidad urgente de garantizar el acceso a los cuidados de las personas que padecen la enfermedad. Una pregunta igualmente importante para los propios afectados a la hora de lograr una mayor concienciación sobre los cuidados que necesitan de por vida. De hecho, como advierte la Sociedad Española de Diabetes (SED), existe un 43% de casos que no están diagnosticados, y un 40-50% de pacientes no alcanzan los objetivos de control.
En este contexto, los profesionales del Colegio de Ópticos-Optometristas de Castilla y León (COOCYL), como agentes primarios de la salud visual, se suman a este Día Mundial para insistir en la importancia de las revisiones oculares periódicas, teniendo en cuenta que hasta un 30% de los diabéticos tiene problemas de visión, muchos de ellos no detectados a tiempo.
Al respecto, la vicedecana de COOCYL, Ana Belén Cisneros, recuerda que “cuando la diabetes no se trata adecuadamente, ocasiona graves problemas de salud”. Y añade que, según la federación de diabéticos españoles, el 16% de las personas ciegas en España lo son a causa de complicaciones a nivel visual derivadas de la diabetes.
A su vez, añade, “un mal control de los niveles de glucosa en sangre puede originar un cambio de graduación, visión doble, opacidad de cristalino, glaucoma y alteración en la percepción de los colores”.
El 40% sin diagnosticar y sin tratar
De las 300.000 personas con diabetes estimadas en la comunidad, solo 180.000 están diagnosticadas y, de ellas, en torno a un 30% nunca han sido sometidas a una exploración minuciosa de fondo del ojo, la prueba más importante para detectar un problema de visión derivado de la enfermedad.
La retinopatía diabética (RD) y el edema macular diabético (EMD) son las complicaciones oculares más habituales de los diabéticos. Es más, la primera de ellas, que se produce como consecuencia del daño generado en los pequeños vasos sanguíneos de la retina y que se va acumulando a lo largo del tiempo, está considerada la principal causa de ceguera en la edad laboral, y afecta a un 65% de los pacientes con diabetes tipo 1 y a entre un 20% y un 25%, en el tipo 2.
En España, 2.500 personas pierden la visión cada año por culpa de la diabetes, siendo la retinopatía diabética la tercera patología causante de deficiencia visual entre los afiliados a la ONCE. Otros problemas visuales como glaucoma o cataratas son un 40% y un 60%, respectivamente, más comunes entre las personas que sufren diabetes.
Serias complicaciones que podrían evitarse con prevención mediante las oportunas revisiones visuales periódicas, que también pueden ser claves para detectar la propia diabetes, ya que las primeras señales pueden aparecer en un examen ocular rutinario.
Sencillas pero efectivas revisiones
“Los reconocimientos oculares regulares permiten a los profesionales sanitarios controlar las alteraciones de la retina y derivar al especialista adecuado cuando la pérdida de visión todavía puede evitarse”, comenta la vicedecana de COOCYL. En el caso de una persona con diabetes, las revisiones, que incluyen la exploración del fondo de ojo, “deben realizarse con cierta periodicidad, al menos una vez al año, para detectar precozmente posibles problemas, ya que cuando la persona desarrolla síntomas de la retinopatía diabética, con frecuencia ya se han producido daños irreversibles en el ojo”, advierte.
El óptico-optometrista puede desarrollar otras funciones para mejorar la calidad de vida de las personas con diabetes, como son las revisiones periódicas de la agudeza visual y la rehabilitación visual como parte del tratamiento ante una baja visión, así como labores de educación e información sobre higiene visual. Otra ventaja de acudir al óptico-optometrista es que es el profesional sanitario de la visión con mayor accesibilidad, ya que existen 453 establecimientos sanitarios de óptica que se pueden encontrar en todos los grandes municipios de la región.
#VivePorTusOjos
Los consejos sobre salud visual en el Día Mundial de la Diabetes se distribuirán a lo largo de todo este mes a través de las redes sociales con la etiqueta #VivePorTusOjos, la campaña impulsada por el Colegio de Ópticos-Optometristas de Castilla y León (COOCYL) para incidir en la idea de que la vida con buena visión es mucho mejor y que, para lograr mantenerla, hay que tener en cuenta cuáles son las revisiones, los cuidados y las medidas de prevención fundamentales.
Una tarea en la que el óptico-optometrista, como agente primario de la salud visual, puede convertirse en nuestro mejor aliado en todas las etapas de la vida, de forma especial paras las personas más vulnerables a desarrollar problemas oculares.