Estimados compañeros:

Acabo de recibir el honor de representar a la profesión de óptico-optometrista en nuestra comunidad de Castilla y León.

Aparte de ser un honor, es una gran responsabilidad que espero llevar con merecimiento y con toda la fortaleza de la que pueda disponer.

Sustituyo a Inmaculada Aparicio; ella, a su vez, lo hizo con Ignacio Ferreira, leyendas de nuestra profesión, ambos comprometidos con la misma, y con una gestión al frente del COOCYL jalonada de éxitos.

Alguna de las decisiones que tomemos en la junta de Gobierno de nuestro colegio puede que no las entendáis o compartáis, pero siempre estarán guiadas por el empeño en el beneficio de la profesión y, por ende, de todos los colegiados.

Deberemos seguir en el progreso de una triple vía:

– Representar a nuestra profesión, en el continuo servicio a nuestra sociedad, intentando alcanzar un mayor reconocimiento de la gran labor que hacemos y, cómo no, por parte de otras profesiones, con las que indudablemente tenemos que colaborar. En este punto, deberemos seguir luchando por la inclusión del óptico-optometrista en el SACYL, necesidad primordial, no diría de nuestra profesión, sino de una mejor atención sanitaria asistencial en Castilla y León.

– La relación entre todos nuestros compañeros, para seguir por la vía del entendimiento y el respeto entre todos nosotros; cuanto más unidos estemos, más fácil será lograr nuestros objetivos.

– Y la tercera vía no es otra que la formación de nuestro colectivo. Este ha sido pilar básico en nuestra evolución. Los que tenéis la bendición de la juventud, no dudéis de que ha sido complicado; a veces con pasos cortos; otras, algo más largos, según las circunstancias, pero siempre con la vista puesta en ese objetivo de ser cada vez un colectivo más unido, formado y reconocido.

Espero vuestro consejo, ayuda y comprensión, no dudéis en colaborar con nosotros en estas labores.

Luis Ángel Merino Rojo,
óptico-optometrista